Robert Bobroczkyi, el actor con discapacidad que tuvo su debut con ?Alien: Romulus?

La más reciente entrega en la saga de horror espacial cuenta con una figura que ya había llamado la atención por su altura y que ahora se convierte en parte esencial de la película de Fede Álvarez.

Fecha de publicación: 26/Agosto/2024 | Autor: Redacción Yo También

Después de siete años de la última entrega, la saga de Alien se renovó este 2024 con el último capítulo de su historia a cargo de Fede Álvarez, en una película que es una secuela directa del primer título de 1979 y que, entre su reparto, cuenta con un actor con discapacidad: Robert Bobroczkyi.

Sólo te avisamos que hay spoilers a continuación, en caso de que todavía no la hayas visto.

En Alien: Romulus, el séptimo episodio de la historia creada por Ridley Scott hace casi cincuenta años, vemos a la humanidad en 2142. La Tierra ha quedado inhabitable y la civilización voltea al espacio para continuar su existencia. Ahí, seguimos a un grupo de jóvenes atrapados por la burocracia en un planeta minero que tomará una oportunidad mortal para escapar, incluso si significa enfrentarse con criaturas que nunca habían visto.

Bobroczkyi, un exjugador rumano de basquetbol ahora convertido en actor, da vida a una criatura nacida de una humana, pero con el ADN de los famosos alienígenas que ya son un icono del terror de Hollywood. Aunque aparece prácticamente sólo en los últimos 10 minutos de la cinta, toma una gran relevancia al ser el enemigo final al que se enfrenta Rain, la protagonista, antes de alcanzar la libertad.

El atleta europeo ya había ocupado los titulares de diversos medios en su pasado. Su impresionante altura de 2.31 metros lo convierte en una persona imponente y que llama la atención en cualquier contexto. Esta característica suya, sin embargo, también ha causado confusión entre la gente y han llegado a señalar que vive con gigantismo, una enfermedad hormonal provocada por una excesiva secreción de la hormona del crecimiento, que hace a las personas desarrollar extremidades más largas de lo normal, pero también puede generar dolor y problemas en los huesos debido a la falta de musculatura.

El deportista no vive con esta condición, como muchos piensan. De acuerdo con un perfil suyo publicado por The Washington Post, esta condición fue descartada por los doctores desde que tenía siete años, siendo un niño mucho más alto que el promedio. El gigantismo parecía la respuesta obvia, pero los especialistas señalaron que su talla simplemente era una herencia genética por la familia de su padre, quienes rozan por encima los dos metros, sumada a un desarrollo saludable durante su infancia.

Lo que sí llamó la atención de los médicos fue la curvatura de su columna vertebral, una condición llamada escoliosis, que produce que este hueso principal adopte la forma de una C o una S, y puede desembocar en discapacidad. A Bobroczkyi, por ejemplo, le causa un fuerte dolor en la cadera y rodillas.

Aun así, es gran fanático del deporte y con 14 años decidió entrar al equipo escolar de basquetbol en Rumanía. Sus habilidades fueron mejorando con el tiempo, mientras él seguía creciendo.

A los 17 años se mudó a Estados Unidos para continuar su educación preparatoria, pero también con el objetivo de entrar al equipo de basquetbol nacional y jugar en las grandes ligas de la NBA. Pero la escoliosis y el daño que provocaba en su cadera se lo impidieron.

Eso no lo desanimó por completo. En 2020 regresó a su natal Rumanía para continuar estudiando e ingresó al equipo de la Universidad Rochester para no dejar de lado su pasión por el deporte.

Ahora, con Alien: Romulus hace su debut como actor y, aunque es poco probable que lo veamos de nuevo en una película de esta saga, lo recordaremos por el gran papel que hizo y, quizá, sea el primero de próximos papeles en Hollywood.

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