Foto de la periodista peruana Carolina Diaz. Ella es Carolina Díaz, la periodista que vive con autismo y está entre las 100 mujeres más influyentes del mundo
A sus 29 años, la periodista peruana Carolina Díaz Pimentel fue diagnosticada con Trastorno del Espectro Autista, una condición que le dio la oportunidad de representarse a sí misma y a la comunidad TEA.
6 de diciembre de 2023
Redacción Yo También
Tras varios años de trabajo, Díaz fue reconocida en la lista de las 100 mujeres más influyentes del mundo, elaborada por la cadena británica BBC, y donde comparte sitio con la exprimera dama de Estados Unidos Michelle Obama, la abogada Amal Clooney y la actriz América Ferrera, entre otras figuras de prestigio mundial.
“Es una noticia muy emocionante. Cuando empecé con todo esto no pensé que llegaría hasta ese punto, pero siento que es una oportunidad para visibilizar, más que el trabajo que hago, a la comunidad neurodivergente. Creo que nos está poniendo en el mapa y es una oportunidad para comenzar a hablar más del tema, combatir la desinformación y luchar por un mundo más justo para nosotras”, sostuvo Díaz en entrevista con Infobae.
La periodista se ha especializado en la cobertura de temas relacionados con la salud mental y la neurodivergencia, además de que ha creado proyectos y organizaciones como ‘Más que bipolar’, su primer diario público, y ‘Coalición Neurodivergente Peruana’, donde organiza talleres y encuentros para la comunidad.
“Había una falta de espacios seguros horizontales, no tanto (en el sentido de) que hubiera alguien por encima de nosotros, sino el de ser libres”, apuntó.
A ella, como a otras muchas mujeres, le han cuestionado su condición.
“No pueden creer que una mujer viva con autismo, que tenga trabajo e incluso redes. A veces me han dicho ‘cómo vas a ser autista (sic) si tienes Twitter’”, aseguró.
Uno de sus proyectos actuales es el de una iniciativa de ley que abarque a toda la población de personas con autismo, incluida la adulta que está “desprotegida”.
Ella, por ejemplo, intentó acceder a una evaluación de perfil sensorial, una prueba que no se realiza después de los 14 años de edad.
“La comunidad de personas con discapacidad psicosocial es muy vulnerable, debido a que sufre no solo el tema del acceso, (sino también) cuando viene con un sesgo y un maltrato. Una persona que tiene un diagnóstico puede llegar a pagar más de un sueldo mínimo, (por lo que) se tiene que trabajar en generar accesos”, concluyó.
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