La web Estadio Azteca no es tan accesible como lo pintan
El editor web de accesibilidad de Yo También hace un análisis del sitio del Estadio Azteca, que esta semana anunció un rediseño para incluir a las personas con discapacidad, y esto es lo que halló.
8 de julio de 2022
Celso Soto
Una revisión general del sitio web del Estadio Azteca me permite observar que el grueso de su información es accesible para lectores de pantalla y otras tecnologías de accesibilidad.
Sin embargo, en este campo de la accesibilidad encontramos problemas, como la estructura semántica del contenido, el reproductor de video embebido y algunos enlaces, entre otros.
En cuanto a la herramienta de accesibilidad implementada, desde mi punto de vista no es la solución adecuada (ni para este ni ningún otro sitio web). Este tipo de herramientas extrae el contenido del sitio original y lo muestra en un sitio espejo con una estructura y presentación visual distinta (que el proveedor de la herramienta considera más accesible); este sitio espejo presenta varias opciones orientadas a mejorar el acceso a la información por parte de personas con distintas discapacidades.
Los motivos por los que considero que este tipo de soluciones automatizadas no son verdaderas soluciones de accesibilidad son los siguientes:
• En primer lugar, el sitio original se mantiene sin modificaciones y a las personas con discapacidad nos refieren a un sitio espejo, por lo cual en lugar de fomentar la inclusión haciendo accesible el sitio principal, nos relegan a intentos de soluciones específicas.
• La información que se extrae no es toda la que contiene el sitio original, por tanto, las pcd acceden a información incompleta o limitada.
• La mayor parte del contenido que no es accesible en el sitio original, tampoco lo es en el sitio espejo.
• Se desincentiva el desarrollo de una cultura organizacional donde se produzcan bienes y servicios accesibles de origen y se fomenta el uso de “parches” de accesibilidad. En estos casos los desarrolladores web del sitio original no aprenden a crear contenido accesible y los contenidos futuros seguirán presentando barreras de accesibilidad.
• Las opciones que muestra la herramienta para las distintas discapacidades (y por las cuales el proveedor de la herramienta cobra), suelen estar incluidas en las herramientas de apoyo que cada pcd utiliza, en el sistema operativo o en el navegador web con el que se acceda al sitio, sin incurrir en costos adicionales. Es el caso de opciones como el zoom, manejo de contrastes, uso de fuentes, uso de lectores de documentos, etc.
• En muchos casos, como el de personas con discapacidad visual o motriz severa, los usuarios no pueden acceder por sí mismos al sitio web y mucho menos activar su modo de accesibilidad. Para hacerlo de forma independiente tendrían que usar previamente una tecnología de apoyo como los lectores de pantalla o interruptores de interacción, y si ya cuentan con una de estas tecnologías (que son mucho más potentes), pues ya no es necesario que un sitio específico cuente con sus propias herramientas de “parchado” de accesibilidad.
En mi opinión, quienes usan o celebran el uso de este tipo de “soluciones” lo hacen por desconocimiento de las Pautas de Accesibilidad de Contenido Web (WCAG), que son las guías correctas de cómo crear contenidos web accesibles; o por querer acceder a una forma rápida y fácil para que su sitio web sea supuestamente accesible.
Por Celso Soto@celso_soto.