Radiografía de cuidados en México: 45.2 por ciento de la población los requieren

Hoy en México ocho de cada diez personas mayores y cuatro de cada diez personas con discapacidad no reciben los cuidados que requieren, lo que las convierte en los grupos con mayores rezagos en sus necesidades de atención, reveló la primera edición de la Encuesta Nacional para el Sistema de Cuidados (ENASIC) 2022, realizada por el Instituto Nacional de Geografía y Estadística (INEGI).

El instrumento reveló que en el país hay 58.3 millones de personas susceptibles de recibir algún tipo de cuidado, una cifra que representa el 45.2 por ciento de la población, es decir, cuatro de cada diez habitantes. 

Para poner el dato en perspectiva, Graciela Márquez Colín, presidenta del INEGI, dijo que la cifra equivale al tamaño de la población total de Italia. La encuesta abundó en la información sobre la demanda de cuidados, pero también en la situación de quienes cuidan. 

“Para nadie es ajeno que la carga de trabajo relacionada con los cuidados recae, de manera desproporcionada, en solo una parte de la población. Un desequilibrio altamente excluyente que abre para muchos el acceso a oportunidades productivas y liderazgos, mientras que dificulta y entorpece el acceso a muchas otras; un desequilibrio continuo y estadísticamente silencioso”, abundó Márquez sobre cómo principalmente las mujeres son quienes realizan los cuidados en los hogares lo que representa un trabajo no remunerado.

Ocho de cada diez hogares tienen una persona que necesita cuidados

La ENASIC encontró que a nivel de hogares, en ocho de cada diez hay al menos una persona que requiere de cuidados, lo que representa el 77.8 por ciento de los hogares del país.

En el desglose de la información sobre hogares, INEGI reveló que hay 15.8 millones de hogares con personas de seis a 17 años susceptibles de cuidados; en segundo lugar están los 12.4 millones de hogares con personas de 60 años o más, luego los 8.4 millones con niñas y niños de entre cero y cinco años, y por último 4.9 millones de hogares con personas con discapacidad o dependencia (incluidas quienes realizan actividades cotidianas con mucha dificultad o que no pueden realizarlas y/o con dependencia por algún problema o condición mental).

Al evaluar el nivel individual, de los casi 59 millones de personas que requieren de apoyos o cuidados, el mayor grupo es de personas de seis a 17 años, con 25.4 millones, de los que 13.2 millones son hombres y 12.2 son mujeres. 

Posteriormente están los 17 millones de personas de 60 años y más, de las que 9.1 millones son mujeres y 7.9 millones hombres. 

En tercer lugar aparece el grupo de personas de entre cero y cinco años, con 10.3 millones conformados por 5.2 millones de hombres y 5.1 millones de mujeres. 

El grupo más pequeño está conformado por las 5.6 millones de personas con discapacidad susceptibles de cuidados, compuesto por 3.1 millones de mujeres y 2.5 millones de hombres.

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Susceptibles de cuidados, pero sin atención

Los datos de INEGI indican que, cuando los reciben, la mayor parte de las personas susceptibles de cuidados lo hace en sus hogares, generalmente por otros de sus integrantes. Sin embargo hay un 35.55 por ciento de personas que no reciben ningún tipo de cuidado, aun cuando lo necesitan. 

Son las personas mayores (de 60 años y más) quienes se encuentran en una mayor condición de escasez de cuidados, pues de acuerdo con la ENASIC, un 77.6 por ciento de quienes están en esta categoría no recibieron cuidados aun cuando los necesitan. 

En el caso de las personas con discapacidad, son 38.5 por ciento, cuatro de cada diez, quienes no recibieron cuidados. 

En contraste, apenas el uno por ciento de quienes tienen de cero a cinco años no recibieron cuidados, mientras que para las personas de seis a 17 años, el porcentaje fue de 20.6 por ciento.

Cuando se evaluó a las personas con discapacidad, el instrumento encontró que apenas un 3.3 por ciento, es decir 0.2 millones de personas, acuden a un centro de cuidados (por ejemplo institución de educación especial, guardería, capacitación para el trabajo, intervención temprana y otro), lo que refleja todavía más la falta de infraestructura y atención para esta población. 

También se observó que de los tres millones de pcd que sí reciben cuidados, en el 33.8 por ciento de los casos es la hija quien cuida, en un 30.7 por ciento es la madre, 19.9 el cónyuge o pareja y en 15.5 por ciento las tareas recaen en algún otro integrante del hogar.

La encuesta también reveló que hay 1.9 millones de pcd requiere de más tiempo de cuidados, especialmente en lo que se refiere a actividades de estimulación física o mental y apoyo de enfermería.

Cuando se trata de personas adultas mayores del millón y medio que sí recibe cuidado por integrantes del hogar, en el 44.3 por ciento de los casos es la hija o nieta quien carga con esa tarea, el 29.4 es cónyuge o pareja. 

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Cómo viven quienes cuidan

La carga desigual de cuidados por géneros, además de significar una desventaja para la participación en el mercado laboral, tiene efectos en la salud física y mental de las personas. 

En México hay 31.7 millones de personas de 15 años y más que son cuidadoras en sus hogares o en otros y el 86.9 por ciento de ellas son mujeres. 

Entre las personas cuidadoras, algunos de los principales problemas de salud reportados -y asociados al aporte de cuidados-, son la depresión y el cansancio, que afectan de manera desproporcionada a hombres y mujeres. 

La ENASIC indica que mientras que el 6.9 por ciento de los hombres cuidadores reportó tener depresión, la cifra subió al 16.3 por ciento en el caso de las mujeres que proporcionan cuidados. 

El cansancio afectó al 15.2 por ciento de los hombres y al 39.1 por ciento de las mujeres cuidadoras; mientras que un menor tiempo de sueño fue una de las consecuencias reportadas por el 17.3 por ciento de los hombres cuidadores y para el 31.7 por ciento de las mujeres. 

Márquez Colín explicó que los datos de la encuesta revelaron que el principal motivo de desacuerdo de las personas adultas para acudir a una residencia o casa de día es la creencia de que los cuidados recaen en las hijas, hijos o familia.

“Como colofón, podemos mencionar que 8.5 por ciento de la población entre 15 y 60 años considera que el cuidado de los integrantes del hogar corresponde solo a las mujeres, 8.5 por ciento”, señaló la funcionaria. 

La encuesta se levantó del 24 de octubre al 16 de diciembre de 2022 y tuvo una muestra efectiva de seis mil 423 levantamientos en hogares.

Los temas que trata son demanda y provisión de cuidados por los integrantes del hogar, repercusión en la salud física y emocional de personas cuidadoras, actividades de cuidado que realizan y su caracterización ocupacional, además de nuevas maternidades y paternidades.

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