La silenciosa carrera de Troy Kotsur, el primer actor con sordera en ganar un Oscar
Con más de 20 años de carrera, el actor de Arizona logró romper un mito y abrir brecha en el cine para personas con discapacidad.
28 de marzo de 2022
Redacción Yo También
Por Redacción Yo También
Antes de mostrar al mundo la estatuilla dorada como el Mejor Actor de Reparto en los Oscars 2022, Troy Kotsur (53 años) ya tenía un largo camino andado en el mundo de los escenarios y el espectáculo. “Si Troy pudiera oír y hablar hubiera ganado premios muchos años antes”, dijo el actor David Kurs, quien también es director artístico de Deaf West Theatre en Los Ángeles, cuando Troy ganó su primer premio por CODA: señales del corazón en el Sundance Film Festival hace pocos meses.
En su discurso de premiación lo primero que hizo fue dedicar el Oscar a “la comunidad sorda, a la comunidad CODA (el acrónimo de Children of Deaf Adults, hijos de adultos sordos) y a todas las personas con discapacidad». «Es nuestro momento», agregó entre aplausos.
Es que dentro de la comunidad sorda estadounidense, él es un referente de resistencia y creatividad porque su ASL (lengua de señas estadounidense) no solo es veloz sino que con detalles y giros de expresión inteligentes y divertidos.
Kotsur está casado con una sorda (y también actriz) y tiene una hija que no es sorda a la que le encanta la música y toca varios instrumentos. En más de una entrevista ha confesado que su fuerte conexión con el personaje hizo que tardara seis meses en afeitarse la barba que se dejó crecer para el rodaje.
Anoche se convirtió en el primer actor sordo en ganar un premio de la Academia.
Y esto es un doble logro, porque son pocos los casos en que un papel de una persona con discapacidad (como exigía este guión) convoca a personas con discapacidad para protagonizar.
A los 9 años, los padres de Troy Kotsur recibieron el diagnóstico de que era sordo y los tres aprendieron a partir de ese momento lengua de señas.
En la escuela descubrió su pasión por la actuación tras presentar un show de pantomima. «Siento que tenía mucho polvo cubriendo mi espalda, y con la nominación (al Oscar), comenzó a evaporarse. He pasado por mucho: problemas económicos y opresión, gente que no está lista para trabajar con un actor sordo», dijo en una entrevista con The New York Times.
Con más de 20 años de carrera, experimentó el rechazo en una industria que históricamente ha caído en los estereotipos y los prejuicios.
«Espero que Hollywood haya aprendido a tener paciencia, porque he sido paciente tratando de trabajar con personas oyentes a lo largo de los años (…) Es muy importante no pensar en los actores sordos desde una perspectiva de limitaciones, porque como sordo puedo conducir, puedo cocinar, puedo tener sexo, puedo hacer todo. Lo único donde hay una barrera es en la comunicación, y eso es todo», agregó en esa entrevista.
De hecho estuvo en la selección final de quienes iban a representar el papel del protagonista de ‘El sonido del metal’.
Curtido en el teatro, la mayor parte de su carrera la ha desarrollado en la Deaf West, una compañía de teatro sin fines de lucro fundada en Los Ángeles en 1991 que adapta clásicos para personas sordas.
Su carrera no ha sido para nada menor: en teatro participó en la obra Big River -ganadora del Tony- y en Spring Awakening.
Ha tenido además presencia en series de televisión famosas como Mentes Criminales, CSI, y Sue Thomas: FB-Eye.
Más recientemente, participó en la exitosa serie The Mandalorian.