¿Y la “unidad administrativa”, Claudia?
Gracias al cuestionario que le respondió al colectivo #YoTambiénVoto, sabemos que habrá alguien a cargo del tema de discapacidad en el nuevo gobierno, aunque no se ha anunciado. ¿Cuáles son los pros y contras de que esté en distintas secretarías?
3 de octubre de 2024
Katia D'Artigues
A dos días de arrancado ya su gobierno, la “unidad administrativa” que Claudia Sheinbaum prometió en el cuestionario que respondió a #YoTambiénVoto no ha sido definida. Es clave para - y la cito- hacer realidad que “la coordinación interinstitucional es clave para atender personas con discapacidad (pcd)”.
Aunque el Conadis sigue existiendo, sabemos que lo quieren desaparecer y tienen todos los votos para hacerlo, entonces no será por ahí. Tampoco fue secretaría de Estado (digo, se vale soñar con una secretaría de Igualdad y Equidad que trate todos los temas de personas en situaciones vulnerables, ¿no?), por lo que sé tampoco fue ya una subsecretaría: ya se hubiera anunciado.
Nos quedaría, si nos va bien, supongo, una dirección de discapacidad que atienda las necesidades de 16.5 por ciento de la población o 22 millones de mexicanos y mexicanas, pero…. ¿anidada en cuál secretaría? ¿Qué dependa de quién? Es interesante analizarlo porque dirá mucho del futuro gobierno.
Hay varias opciones: la secretaría de Salud, la de Bienestar o la de Gobernación. Que dependa la persona con discapacidad titular de esta “unidad administrativa” (otra promesa de campaña: que viva con discapacidad) o de David Kershenobich, de Ariadna Montiel o de Rosa Icela Rodríguez, respectivamente.
¿Cuáles son los pros y los contras de cada titular y secretaría?, ¿qué mensajes podría mandar? Vamos una por una.
La secretaría de Salud es históricamente el lugar de la discapacidad. Pero también es parte de una visión caduca de las personas con discapacidad sólo como personas “enfermas”(ya quedamos que la discapacidad es una condición y no una enfermedad, ¿verdad? Díganme que sí aunque me mientan). Le llamamos el “paradigma médico”. Aunque sin duda que se necesitan esfuerzos en temas de salud para atenderles, no lo es todo y mandaría señal de retroceso.
De David Kershenobich tengo cosas buenas qué decir. En mi breve encuentro con él en el foro que organizamos de “Diálogos por la transformación” demostró ser un hombre muy capaz en lo suyo y también abierto a ver la discapacidad de otra manera.
La opción actual, la del todo el sexenio de AMLO, fue la secretaría de Bienestar. Suena bien en teoría porque se necesitan apoyos sociales y es la secretaría para ello, sin embargo todo se concentró sólo en las Pensiones para el Bienestar sólo como un programa asistencialista y no pasó de ahí. Hoy se entregan millón y medio de estas pensiones a pcd y se piensa ampliar.
A lo largo del sexenio hablé varias veces con Ariadna Montiel y la vi evolucionar. Tras un tartamudeante inicio, donde no sabía ni el nombre de la Convención sobre los Derechos de las personas con discapacidad, a tener mucho más lenguaje en tono de derechos humanos y saber el tamaño de la tarea y sus implicaciones también por razones personales: vive la discapacidad de cerca.
Sin embargo, como ella misma me lo dijo, el presidente le había encargado las Pensiones… ya después todo lo demás. La nombró no oficialmente la encargada del tema y ella lo dijo públicamente. Como aún no es una pensión universal y están haciendo acuerdos con los Estados, pues no ha terminado esta primera tarea.
Incluso cuando anunció la alianza para rehabilitación con el Teletón, ¡ella no sabía, se enteró en la propia “Mañanera”, como solía pasar el sexenio pasado! Y claro, como fue instrucción presidencial, se encargó de hacerla realidad, aunque el Teletón atiende sólo a 2 de cada 10 niños, niñas y adolescentes con discapacidad motriz (y no otras discapacidades) y esta alianza hecha con dinero público no es tan transparente que digamos.
La pregunta aquí es: Si la “unidad administrativa” se nombra en Bienestar, ¿la instrucción de la presidenta será distinta, como prometió? ¿Sí se encargarían de hacer realidad la coordinación interinstitucional necesaria?
La tercera opción es en Gobernación, con Rosa Icela Rodríguez. Es una buena opción como señal porque es la secretaría de los Derechos Humanos y los derechos de personas con discapacidad son derechos humanos. Ahí están hasta el momento los titulares de las diversas dependencias que atienden a grupos en situación de vulnerabilidad: mujeres, niños, niñas, adolescentes, migrantes.
Rosa Icela misma sabe del tema de derechos humanos, de hacer programas para hacer avanzar la agenda, lo demostró con el tema de personas mayores.
¿Cuál será el camino de Claudia Sheinbaum, la primera mujer presidenta de México? Hay que estar pendientes.
No fue la única promesa de campaña, les recuerdo la nota ‘La coordinación interinstitucional es clave para atender personas con discapacidad’: Claudia Sheinbaum donde también pueden leer su contestación completa tal cual nos la envió en mil 245 palabras. Pero hago énfasis en la famosa “unidad administrativa” porque si está en la secretaría adecuada y nombran a alguien con discapacidad e igualmente importante con poder de interlocución, ayudaría muchísimo a operar también las otras promesas de campaña y en una de esas mucho más.