Mamá e hija artistas comparten su historia al mundo tras ser diagnosticadas con autismo

Luciana y Luisa son madre e hija, ambas son artistas y desde hace dos años fueron diagnosticadas con autismo. Juntas publicaron un libro ilustrado basado en su propia vida con el objetivo de concientizar sobre el espectro autista.

Cuando Luisa tenía seis años, sus maestros alertaron a su familia respecto a la dificultad que la niña tenía para integrarse en los ámbitos escolares; así inició un camino de consultas médicas y tratamientos, sin dar con el diagnóstico preciso hasta sus 12 años.

"Nos pasó como a muchas familias, que todavía se desconoce mucho acerca del autismo. Por más que ahora se hable un montón todavía hay desconocimiento y en el campo de las mujeres más aún", expresó Luciana en una charla para Infobae.

Al entender lo que le sucedía a su hija, Luciana, a sus 48 años, descubrió que ella también vivía con autismo. Aseguró que anteriormente había asistido a terapia y recibió distintos diagnósticos, desde depresión, fobias, ansiedad, hasta desregulación emocional. Puedes leer más al respecto: Autismo en la adultez: Luciana recibió su diagnóstico a los 48 años .

"En realidad todo eso venía del mismo lugar. El enfoque estuvo mal desde que yo era chiquita y lamentablemente le pasa a un montón de mujeres, que terminan mal medicadas, o sin medicar, pero con un tratamiento que no es el indicado", comentó.

Confesó que cuando confirmó su diagnóstico de TEA, sintió que era una oportunidad para volver a conocerse a sí misma. “Entendí que no era la excepción, que le sucede a muchas y empecé a aceptar las cosas fuera de la norma que me sucedieron toda la vida, porque es lo mejor que podemos hacer”, detalló.

‘Sin Ofender’, el libro que plasma sus vivencias

Luciana expresó que tiene tres pasiones que la acompañaron desde su infancia hasta la actualidad: el dibujo, el baile y la jardinería. Estudió escenografía y trabajó como azafata un tiempo, pero regresó al dibujo como forma de expresión. Por su parte, a Luisa también le encanta dibujar y su sueño es convertirse algún día en mangaka. 

Como testimonio de su recorrido escribieron, ilustraron y publicaron 'Sin Ofender', un libro que incluye diálogos reales y dibujos de ambas. Asimismo, conjuga la sensibilidad, la ilustración y el arte con el deseo de que su testimonio propicie una convivencia inclusiva. 

"Es nuestra versión, con mucho respeto, sin ofender, porque es nuestra vivencia, y yo no soy ni médica ni licenciada, no es un libro de investigación científica”, aclaró. 

Luciana aseguró que siempre había tenido la idea de hacer un libro ilustrado, pero después de sus diagnósticos la idea tomó un significado aún más poderoso: “Luego de ese tsunami, de ese maremoto que pasamos, sentíamos que teníamos que hacer un cuento para concientizar sobre el autismo, que había mucho por comunica”, comentó.

Ambas sueñan con una segunda edición del libro para distribuirlo en puntos de venta, algo que hasta ahora no pudieron hacer: “Hicimos una edición muy pequeña, autogestionada, pero nos encantaría que alguien nos apoye para lanzar la segunda edición y llegar a más personas que lo necesiten”.

Muestra artística de ‘Sin Ofender’ en Argentina

La publicación del libro llevó a las dos artistas a inaugurar una muestra de su trabajo en el Centro Cultural de San Martín, en la ciudad de Buenos Aires. La exposición proponía a los espectadores animarse a identificar las fortalezas que los hacen sentirse únicos y hacía hincapié en que el autismo no es una enfermedad, sino una manera distinta de percibir el mundo. 

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